Revista Economía No. 206 octubre – diciembre 2015

El Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales -IIES- de la Universidad de San Carlos de Guatemala, presenta a sus lectores la Revista Economía 206, correspondiente al trimestre octubre-diciembre 2015.

Contenido

Ley de Cambio Climático y los recursos presupuestarios asignados para su aplicación
Lic. Axel Ely Ruch Molina

INTRODUCCIÓN:

La profundización del Cambio Climático es un fenómeno causado por la actividad productiva del hombre, infinidad de expertos han comprobado que desde la aparición de la propiedad privada por el desarrollo de la fuerzas productivas el ser humano ha cambiado parcial o regionalmente algunos ecosistemas, provocando desapariciones o inmigraciones de formas de vida a lugares distintos de su origen. Se puede traer a colación que la actividad productiva en el lugar que se conoce como la Mesopotamia dejó tras de sí un desierto, de igual forma sucedió en lo que hoy es el desierto del Sahara, lugar donde originariamente existía una fértil selva con una compleja interrelación biótica. Estas acciones destructoras del ambiente se han realizado a pesar que el ser humano desde su aparición ha pensado y propuesto medios para mantener una relación de equilibrio de este con su medio, tómese como ejemplo las sociedades primitivas y las poblaciones originarias de América que han tenido formas de pensar a la Naturaleza como origen de todas las formas de vida y a la que hay que cuidar para preservar la vida.

Es en el esclavismo y el Modo de Producción Asiático, formas sociales donde predomina la propiedad privada sobre los medios de producción, donde la actividad productiva comienza a requerir más satisfactores de los que en realidad se consumen, debido al desarrollo de las fuerzas productivas y al goce desmedido, despilfarro y concentración de la riqueza de que hacen acopio las clases dominantes, donde empiezan a explotarse los recursos naturales irracionalmente; civilizaciones como Grecia, Roma, Babilonia, Egipto, China, incluso la Maya que, las dos primeras se desarrollaba bajo el Modo de Producción Esclavista y las siguientes bajo el Modo de Producción Asiático, destruyeron sus bases de vida como el suelo, los bosques, los recursos hídricos, fauna; aunque la potencia de las fuerzas productivas de aquellas civilizaciones no representaba todavía una amenaza globalizada al ecosistema planetario ya existían pensadores que declaraban que el aprovechamiento de los recursos naturales debía hacerse con austeridad para salvaguardar el equilibrio Hombre Naturaleza y plasmaron sus ideas en libros que describían ciudades ideales en donde se ordenaba el funcionamiento de la sociedad y su relación con la Naturaleza, ideas que no fueron tomadas en cuenta por quienes gobernaban en ese entonces.

La Agroecología como alternativa a la Seguridad Alimentaria (I)
Lic. Carlos Morales López

El discurso que determina como indispensable el paquete de la “revolución verde” (herbicidas, fungicidas y fertilizantes) en los procesos agrícolas ha llegado a su etapa crítica. Precisamente en un momento en que las necesidades alimentarias de la población rural siguen insatisfechas. Debe agregarse la inoperabilidad de las instituciones estatales, es necesario insistir en esto, específicamente el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) y el Instituto de Ciencia y Tecnología Agrícola (ICTA) que tienen alta responsabilidad con la investigación agrícola y seguridad alimentaria de la sociedad guatemalteca. Los escenarios para los procesos agrícolas se complican desde tres perspectivas.

La primera, desde el Estado, se desconoce sobre los éxitos alcanzados por los diferentes programas agrícolas implementados por el gobierno de Otto Pérez Molina. Específicamente, sobre extensión agrícola, la contratación de profesionales anunciada por el presidente de la república. Estas contrataciones significan, desde la perspectiva gubernamental, un paso muy acertado para intercambiar conocimientos agrícolas amigables a los ecosistemas. Un intercambio en donde el Estado manifiesta su voluntad de colaborar y ayudar a las familias para salir de la subalimentación. Desafortunadamente los extensionistas fueron contratados para dar continuidad a programas clientelares como el de fertilizantes, que lejos de integrar a las comunidades rurales creó mucho más descontento y desconfianza por los criterios utilizados en la selección de los beneficiarios. En el mejor de los casos la aprobación de la Ley de Desarrollo Rural pudo contribuir en mayor atención al área rural, pero nuevamente fue relegada por el congreso de la república y los intereses proclives a la agro exportación fueron la prioridad. Mientras tanto la seguridad alimentaria de la nación tendrá que esperar unos años más. Un segundo elemento a considerar es el deterioro de los recursos naturales, específicamente el suelo. Provocado no solo por la pobreza, por prácticas poco amigables con la conservación, bajo la “necesidad” incrementar las agro exportaciones y el “desarrollo” de la industria y mercado maderero. El tercer elemento, la variación climática, como se le conoce en las zonas rurales o cambio climático, como lo han definido los científicos. Por último, el alto precio de los energéticos utilizados en los procesos agrícolas. En un momento en que los precios mundiales se expresan a la baja, no hay manera de que esto se traduzca en beneficio de los pequeños agricultores. Es decir una rebaja en el precio de los fertilizantes necesarios para dar continuidad a la revolución verde, arrastrándolos a procesos agrícolas antieconómicos. En las actuales condiciones es impensable que los procesos agrícolas de pequeños productores rompan de tajo esa relación de dependencia energética. Tampoco es descabellado, como lo han llamado los promotores y comerciantes de fertilizantes, incursionar en otros procesos agrícolas que han dado buenos resultados en varios países de América Latina. Las posturas en contra de estos procesos agroecológicos tienen mucho sentido, puesto que provienen de marcos cognitivos e institucionales creados por la revolución verde. Dichos marcos han sido poco cuestionados en las distintas propuestas y siguen vigentes desde hace muchas décadas en instituciones locales como el MAGA, ICTA e instituciones de educación superior.

“Los instrumentos de política económica para la gestión ambiental”
MSc. Edgar Arturo Marroquín López

Introducción

Cada vez es más importante la protección al medio ambiente por las graves consecuencias que su destrucción y deterioro pueden producir para el desarrollo de la humanidad, y siendo evidente e ineludible la importancia del papel del Estado en esta protección, es necesario identificar, investigar, analizar y establecer, cuantitativa y cualitativamente, los principales instrumentos de política económica con que el Estado cuenta para la debida gestión ambiental en el país; identificado, a la vez, los principales obstáculos económicos, políticos y sociales existentes y que se oponen a una adecuada utilización de los instrumentos económicos de gestión.

En consonancia con lo anterior, en la presente investigación se exponen los temas referidos al problema ambiental y el papel del Estado, los enfoques ideológicos y otros condicionantes sobre el tratamiento del problema ambiental, los instrumentos de gestión ambiental (económicos, técnicos y regulatorios), el marco institucional ambiental, la situación de los ingresos económicos para la gestión ambiental, los flujos entre el ambiente y la economía; incluyendo finalmente algunas reflexiones sobre los instrumentos económicos de gestión ambiental y los obstáculos para su aplicación y efectividad.

Turismo Sostenible en Guatemala Parte I
Licda. Mónica Floridalma Hidalgo Motta

TURISMO Y TURISMO SOSTENIBLE

El Turismo es una actividad económica que promueve y fomenta la circulación de dinero, especialmente divisas, y de personas que residen en el país o en el extranjero, que se desplazan dentro de un territorio para apreciar los atractivos con que cuenta un país.

Según la Organización Mundial del Turismo (OMT) de las Naciones Unidas el turismo comprende las actividades que realizan las personas (Turistas) durante sus viajes y estancias en lugares distintos al de su entorno habitual, por un periodo de tiempo consecutivo inferior a un año, con fines de vacaciones, por negocios y otros motivos. La misma organización indica que el turismo es la suma de relaciones y servicios resultantes de un cambio de residencia temporal y voluntaria, no motivada por razones de negocios o profesionales.